martes, 2 de septiembre de 2008

A CERCA DE LA MÚSICA

El hombre que no tiene música en su interior,
aquel a quien la meditación no le sugiere dulces melodías,
no sirve más que para traidor, ladrón, malévolo;
la voz de su interior es lóbrega como la noche,
su ilusión es árida como el Erebo.
¡No confíes en nadie semejante! ¡Escucha la música!
(Shakespeare)

No hay comentarios: